SIGMA participó el pasado 11 y 12 de abril en las Jornadas de la RUEPEP. El lema del encuentro era “Estrategias y Alianzas para el Futuro de la Educación Permanente” y quiso poner de manifiesto la necesidad de abrir la forma de trabajar a la colaboración entre Universidades e Instituciones para compartir objetivos.
En las exposiciones, se destacó la necesidad de acercamiento entre másteres universitarios y propios, el tema de los importes así como la competitividad entre universidades y de la relación con las universidades privadas donde se encuentra un l20% de alumnado de másteres universitarios.
Se habló de la cualificación de los trabajos, destacando que en 2020, solo el 15% será poco cualificado y el resto serán trabajos cualificados dónde la universidad tiene una gran responsabilidad en formar. Por lo tanto, se deben definir itinerarios formativos más flexibles para atraer alumnado que cada vez será más multigeneracional y multicultural.
Se trató la situación económica del posgrado y de la rapidez de cambio de escenario, por ejemplo, la proporción de estudiantes mayores de 30 años ha crecido mucho y se debe tener también en cuenta. La receta es la flexibilidad y se debe conseguir reforzar el principio de equidad, que nadie se quede fuera de la universidad por la financiación.
Se realizó una presentación sobre los cursos en abierto, MOOCS, donde se explicó su corta historia y sus precursores allá en 2008 (David Wiley, George Siemens y Stephen Downes), para demostrar una teoría con contenidos provocadores y para que los alumnos interactuaran y como en 2011 Sebastian Trun y Peter Norvig hicieron un curso de inteligencia artificial donde se matricularon 160.000 personas y 20.000 completaron el curso. En 2012 empieza Coursera, Udacity y Edx. En 2013 se popularizan los MOOCS y se habla de las hipótesis de futuro.
Posteriormente, se realizó un taller donde varios grupos analizaron las principales problemáticas y escenarios de la formación continua y se realizaron propuestas que posteriormente se presentaron en sesión plenaria.
Finalmente se realizaron nuevas sesiones donde se habló de que la universidad debe proporcionar a sus estudiantes el nivel necesario para poder competir con estudiantes de otros países en igualdad de condiciones. Se habló de las problemáticas con ANECA y las certificaciones y las diferencias entre el ritmo en la universidad y fuera de ella.
Por último se expusieron casos de éxito de colaboraciones entre universidad – empresa, y que esa relación existe de forma satisfactoria aunque deba aumentar.